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Mostrando las entradas de abril, 2019

¡DESCANSA EN DIOS, NO RENUNCIES!

Cuando las circunstancias abruman, quizás lo más sencillo que podemos hacer sea tirar la toalla,  😥  pero aunque esto sea lo más viable –o hablando claro: lo que nos provoque al momento– no quiere decir que sea lo más acertado.  😕 . El propósito de la adversidad no es destruirte, tampoco aniquilar tus sueños o desanimarte; estas son simples estrategias para lograr el objetivo principal: apagar tu fe.  😳  Cuando nos cansamos, nuestra fe mengua; entonces llega el desánimo, el pesimi smo, la resignación, la desesperanza, y todas esas influencias que nos llevan a renunciar a eso por lo que tanto habíamos luchado hasta el momento.  😞 . No en vano, Pablo comparó la fe con una buena batalla, también se refirió a ella como una carrera que completó (2 Timoteo 4:7). Porque en una batalla, el que retrocede, pierde; y en una carrera, más que ganar, lo importante es avanzar a paso firme hacia la meta para que no te descalifiquen.  🙇 . Entonces, ¿qué hacer cuándo se te enfría la fe y el des

¿CUIDO LO QUE TENGO?

Muchos de nosotros tenemos posesiones de gran valor monetario o sentimental, que guardamos en un lugar secreto y seguro para impedir que alguien lo tome o que se dañe… Pero, ¿Hacemos lo mismo con nuestra mente y corazón? ¿Mostramos el mismo esfuerzo para proteger y asegurar nuestra relación con Dios? Si bien nos esforzamos para cuidar esas posesiones valiosas, así también debemos cuidar nuestra vida espiritual de aquel ladrón (satanás) que no sólo quiere arrebatarnos cosas o personas de nuestra vida, sino que desea vernos destruidos. Ante la amenaza constante del enemigo, debemos ser sabios y oír el consejo de Dios sobre el cuidado que debemos tener. Cuida tu corazón  “Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida.” Proverbios 4:23 (NTV) No permitas que las circunstancias adversas llenen tu corazón de tristeza, resentimiento, amargura, orgullo, etc. Cuida tus palabras  “El que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labi

¿MEJOR QUE YO? ¡JAMÁS!

Hace algún tiempo tenía que asistir a un evento social con una amiga; pero ella cambió de parecer a última hora y tuve que ir sola. Al día siguiente le pregunté por qué no había asistido, a lo cual ella dijo: “ Todas las que iban a ir son muy bonitas “. Ante esta inesperada respuesta, le dije que no entendía por qué eso podría considerarse una razón válida para no asistir. Ella respondió:  “Cuando veo a otras mujeres más bonitas que yo, siento que soy un sapo en medio de princesas. Es horrible porque me siento mal conmigo misma y no soporto ver que otras sean más hermosas. ¡Dios es tan injusto porque no me hizo como ellas!”. Luego cuando vio las fotos del evento, no dejaba de señalar lo bellas que se veían las demás, pero entre sus halagos se podía distinguir un atisbo de envidia. Nadie halaga sinceramente. Este no es un caso aislado. Al igual que mi amiga, la mayoría de mujeres tiende a sentirse un poco intimidadas ante la presencia de alguien a quienes ellas consideran 

"NO APTO PARA HOMBRES"

1- Que no entiendan que ellos se pongan mal si su equipo deportivo pierde. A las mujeres no nos preocupa tanto cómo va el juego, pero para los hombres el resultado final puede cambiar su humor ¡hasta por una semana completa! Esto se debe al compromiso y el sentido de pertenencia que tienen con su equipo. 2- Que se burlen de su juego de vídeo o del hecho de que se apasionen jugándolo. Para los hombres que juegan todas las noches un tiempo determinado de su juego de vídeo, ese tiempo es sagrado y su vídeo juego es de respetar. 3- Los mensajes indirectos o poco claros. Las mujeres tendemos a lanzar indirectas o queremos que entiendan las frases “subliminales” que les enviamos. Pero los hombres son claros y directos. Les gustan las cosas concretas. Si es si es sí, y si es no es no. Cuando de indirectas se trata, no las captan y no les gustan. 4- Detestan las mujeres a dieta. Ellos no soportan que una mujer no disfrute de la comida. Y a ellos, que queman muchas más ca